Solo nos quedan unos días para entrar en la primavera meteorológica y, yo por lo menos tengo la "sangre" revolucionada. Soy como las plantas, a finales de invierno ya va brotando una energía diferente en mi.
Uniendo el tema primavera a todas las emociones sufridas durante este último año por la pandemia del Covid. Añadiendo otros factores que están como satélites girando a mi alrededor, provoca que todo ésto al agitarlo como si de un cóctel se tratara que mi adrenalina esté funcionando a tope.
Así que como ando como una moto, la primavera ha asomado a mi casa antes de tiempo y estoy con algunos cambios.
Tenía la necesidad de darle color al salón y con estos linos he hecho unas fundas de cojín. Últimamente soy más práctica, no me ha dado por hacer cojines de patch.
Cómo hemos estado confinados tres semanas en el Area de Salud y otras tres en el municipio, últimamente todo lo que compro es por internet. Mientras buceaba en éste mundo infinito, vi estas telas y me enamoraron. Enseguida pensé en dónde las iba a ubicar.
Me sobró tela de ambos colores para hacer unos pequeñitos.
Y ya que estaba en modo cojín,
hice otra funda nueva a uno de los cojines de mi hijo.
Cada mañana los coloco de una forma. !!!!Qué buena soy!!!!, me conformo con tan poquito, jajaja