Homenaje a mamá

Los homenajes se suelen hacer a las personas fallecidas y yo se lo voy a hacer a mi madre en vida. Llevo mucho tiempo queriendo exponer sus trabajos en el blog, pero por unas cosas u otras lo he ido dejando. 

Ayer hablando con Silk sobre el ganchillo y las personas de nuestras familias que hacen ésta técnica, me vino a la cabeza la idea que tenía de hacer a mi madre un post, así que aquí va un poquito de su historia. 

Mamá, es mayor, tiene 85 años y toda su vida ha estado haciendo labores. Ella es autodidacta, nunca fue a ningún sitio que la enseñaran y mis hermanas y yo cuando salíamos a la calle con alguna cosa que nos había hecho mamá, siempre nos paraban las mamás de nuestras amigas para ver cómo estaba hecho  lo que habíamos estrenado y sin "jactanciarme" diré que eramos la envidia de muchas niñas del barrio. 

Ella nos ha hecho todo, empezando por las braguitas, camisetas y calcetines de ganchillo, pasando por los vestidos, faldas, pantalones, blusas y todo aquello que se hiciera con tela y aguja, hasta los jerseys, chaquetas, bufandas y cualquier cosa que se tejiera con lana. Recuerdo que yo tenía más o menos 15 años cuando ella se compró aquellas máquinas para tejer, y sin estudios y sobre todo de matemáticas, ella nos hacía verdaderas preciosidades con aquella máquina.

Que nos gustaba aquel vestido que habíamos visto en un escaparate, ella iba, miraba, requetemiraba y  hala, al poco tiempo teníamos nuestro vestido. Cuando estaba embarazada de mi hijo mayor, un día me enseñó una estrella o como se llame, de ganchillo y le dije - muy mono, para que es? - Había visto una toquilla en un escaparate de ropa para niños y cuando llegó a casa, cogió lana y el ganchillo y saco la estrella, idéntica a la de la tienda... la toquilla estaba compuesta por estrellas como la que me había enseñado y por dentro con punto, que hizo, con esa pedazo de máquina que os he comentado antes. Algún día sacaré la toquilla y la haré una foto.... la tengo guardada como oro en paño. 

Cuando ya nos casamos las cuatro hermanas, dejó de vestirnos... bueno mejor dicho, nunca ha dejado de hacernos cosas, no sólo a nosotras, sino a los yernos,  a sus cinco niet@s  y  a las parejas de sus niet@s  y a sus tres biznietos. Cuando iba a nacer un nieto, otra vez que se iba a los escaparates a ver trajecitos, o se compraba alguna revista y según iban creciendo les seguía haciendo jerseys o cualquier cosa que se la pida.

Ha hecho colchas de ganchillo para todas nosotras, para algunas de las camas de su casas y para su niet@s, nos ha hecho tapetes, pañitos y nos ha hecho, y nos ha hecho y no acabaría nunca de escribir.

Como esta chaqueta de ganchillo, hizo 5, una para cada una de nosotras y otra para ella. Esta muy viejita, pero nunca me desprenderé de ella.

Mirar el detalle del dibujo, los puños y el piquillo que lleva todo alrededor de la chaqueta.

Este tapete sale en muchas de las fotos que pongo con mis labores. Me lo hizo por lo menos hace 8 años. pero no hizo uno, sino dos. El primero, cuando lo terminó vio que había quedado muy pequeño para cubrir toda la mesa, y como buena aragonesa, se puso y me hizo el que veis.

Con el otro yo lo utilicé para hacer un stor para el pueblo.

Queda mucho más bonito al natural que en la foto.

Detalle del punto central y de la greca de alrededor.

Esta es una de las partes de otro  tapete que me hizo, pero este no cubre toda la mesa, sino es en diagonal. Lo tengo guardado, ya que está muy desgastado. Fue el primer tapete que me hizo, y cuando vio que ya estaba muy "usado" me hizo el otro.

A mi generalmente no me gusta poner pañitos en las mesas, o muebles en general. Este pañito con vuelo sí lo tengo puesto, ya que un día,  sin pedírselo,  me lo regaló y entonces ahí está.

Esta es una de las bolsas de pan que me ha hecho. En la familia somos 8 mujeres, más ella, y cada una de nosotras tenemos por lo menos dos bolsas de pan....

Pero, siempre hay un pero, hace unos años ella empezó a tener esas nubes que se ponen en la memoria de la gente y que hace que no recuerdes a veces cosas, empezó a tener ausencias y ya nos nos puede hacer todas aquellas cosas que os he contado y las que no os he contado. Aún a pesar de ello, ella nunca deja de hacer ganchillo y nos sigue haciendo cosas, pero el ganchillo que ella hace es muy sencillo, cómo digo yo son palotes y más palotes. Sus trabajos ya no son de admiración en cuanto a su ejecución, pero si lo son en cuanto al tesón que tiene y que como digo yo se morirá con el ganchillo en la mano.

Siempre la tenemos ocupada haciéndonos algo, es la mejor manera de que ella no deje parada su mente. La encargamos que nos haga piquillos para mantelerías, bufandas, y sobre todo nos hace mantas de ganchillo para el sillón, es lo más fácil y el resultado es bueno, ya que ella si hace algo que ve que no está bien se angustia mucho y entonces se pone nerviosa y se bloquea más. 

El piquillo de ésta mantelería de Navidad es una de las últimas cosas que me ha hecho.

No sabe que yo estoy escribiendo sobre ella, pero si le enseñaremos este post para que vea que su trabajo estará siempre reconocido por todo aquel que la rodea. 

En otro momento, pondré algunas más de sus trabajos.