El otoño ya está muy avanzado y creo que es el mejor momento para poder ver todos los tonos que nos da la naturaleza, como va cambiando la luz y los paisajes, es la estación que más me gusta y sus colores me inspiran y dan tonalidad a mis trabajos.
Con una tela muy propia del otoño he forrado la tapa de la última caja que he pintado.
Una caja que tiene más de 20 años y ya le había llegado el momento de darle otro aspecto.
Después de las que he pintado este verano creo que cualquier caja de las que tengo sin decorar, serán pasto de los pinceles.
Dentro de la tapa también la he decorado, para eliminar cualquier vestigio que le quite encanto y sea un motivo de despiste para admirar la tela.
No soy de verdes, pero creo que ha quedado fantástica.
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